Sueños....

Mírame por última vez, cógeme de las manos y no me sueltes. Quiero ver que tu sonrisa no desaparece en ningún momento. Ahora, mientras estamos solos tú y yo, susúrrame al oído todo lo que no te habías atrevido a decirme antes; en este momento sólo existimos nosotros, no hay nadie más que pueda juzgarnos, nadie más que nos señale como si fuéramos monstruos. Quiero que cada momento que estemos juntos sea único y especial, que nunca lo olvidemos. Quiero que por una sola vez, te fijes en mí y olvides todo lo que tienes en la cabeza; ahora sólo importa lo que sientes en el corazón. Nadie más rondará en tus pensamientos, sólo recordarás los momentos que vivimos juntos; todas aquellas charlas, esas risas que compartimos...

Para mí sólo hay un TÚ, ¿por qué para ti no?, ¿por qué todo lo tienes que complicar de esa forma? Es muy sencillo, sólo tienes que amarme, aunque sea la mitad de lo que te amo yo. ¿No te das cuenta? ¡Sería todo perfecto! Tú y yo, juntos de una vez por todas, mis deseos se cumplirían. Por una vez, todo lo que había soñado, todo por lo que había sufrido, se haría realidad. Toda la rabia, las risas, los llantos...todo valdría la pena. No habría nadie que nos separara, no habría nada que impidiera verte a mi lado, que tus manos agarraran mi cintura, que nos hundiéramos en una mirada, que tu sonrisa volvería a aparecer… No sufrirías, no existe el dolor conmigo; para mí tú lo eres todo, y sólo importa lo que siento.
Cada momento que estuviéramos juntos se convertiría en un paraíso, que cada palabra que dijeras fuera como un tesoro escondido en medio de un océano. Estaríamos unidos, inseparables, sin que nada pudiera acabar con nuestra felicidad….

Y ahora que vuelvo a la realidad, ahora que vuelvo en mí y salgo de mis sueños y pensamientos, me doy cuenta de que todo lo que había soñado, es simplemente eso; sueños. Sueños que no se harán realidad, sueños que se desvanecen por cada segundo que pasa…
Al cabo del tiempo, esos sueños serán una historia escrita en papeles. No te veré más, y puede que hasta olvide tu rostro, que nuestra separación haya causado el olvido final. Te irás, y me dejarás sentada en la esquina, con lágrimas cayendo por mis mejillas. No te importará nada de mí, olvidarás lo poco que significó para ti nuestros momentos juntos. Ni siquiera mirarás atrás, no te inmutarás por una cría como yo.
Porque tu olvido es mi sufrimiento…